Las ciudades, con su frenético ritmo y paisajes de llenos de asfalto, a menudo nos hacen olvidar que la naturaleza también encuentra su lugar entre el ruido y las luces. Entre edificios, calles y parques, hay una sorprendente cantidad de aves que comparten este espacio con nosotros.
Sin embargo, muchas veces ni siquiera nos damos cuenta de su presencia, como si fueran sombras fugaces o pequeños destellos en el aire. Estas aves urbanas, adaptadas al entorno humano, tienen sus propias historias que contar, aunque rara vez las escuchamos. Hoy vamos a descubrir cinco especies de aves con las que convivimos y que permanecen ocultas a simple vista, pero resultan esenciales para el equilibrio de este ecosistema urbano del que todos formamos parte.
1. Pito ibérico (Picus sharpei)
El pito ibérico, anteriormente conocido como Picus viridis sharpei, es una de esas aves que, a pesar de lo que podamos pensar en un primer momento, es una de las aves mejor adaptadas a los entornos urbanos. Este pájaro, de tamaño, colores y comportamiento llamativos, tiene un trabajo muy importante: mantener a raya las poblaciones de insectos que captura con su potente pico y larga lengua.
Si alguna vez has paseado por un parque o zona verde y escuchaste un sonido de repiqueteo o un relincho en la lejanía, probablemente haya sido un pito ibérico el culpable. Aunque este pájaro es típicamente asociado con bosques, las ciudades con espacios verdes se han convertido en su nuevo hogar. A menudo, se encuentra en parques y jardines urbanos, especialmente donde hay árboles viejos o enfermos.
Es realmente fascinante como estas aves de la familia de los pájaros carpinteros o pícidos, hayan sido capaces de adaptarse con tanta facilidad a entornos tan hostiles como son las grandes urbes.
2. Herrerillo común (Cyanistes caeruleus)
En las zonas arboladas de la ciudad, donde la gente se apresura en su día a día, un pequeño destello azul y amarillo es testigo de nuestro día a día. El herrerillo común, con su pequeño tamañoy su potente trino, ha aprendido a convivir con nosotros sin que le prestemos mucha atención.
Con una curiosidad y desparpajo asombrosos, a menudo son los primeros en visitar los comederos en parques y jardines, deslizándose entre ramas y hojas mientras se alimenta de insectos y frutos. Es increíble cómo este pequeño pájaro, de apenas 10 gramos, es capaz de sobrevivir en mitad de las ciudades con tanto éxito. Sin embargo, su presencia y la aguda mirada de quién se detiene a mirarlos son los hilos invisibles que mantienen conectados la naturaleza con nuestras vidas cotidianas.
3. Lavandera blanca (Motacilla alba)
La lavandera blanca es la acróbata del paisaje urbano. En parques, plazas e incluso en las orillas de los canales, esta pequeña ave se desplaza de un lado a otro con movimientos rápidos y precisos, balanceando su cuerpo en una danza que parece desafiar la gravedad. Su plumaje blanco y negro es inconfundible, pero lo que realmente la hace especial es su habilidad para capturar insectos. Con sus saltos, acrobacias y revoloteos, este paseriforme llena nuestras zonas verdes de vida.
Si alguna vez has caminado por un parque y has visto una figura moviéndose de manera peculiar entre las plantas o realizando saltos y vuelos, es bastante probable que hayas sido testigo de la presencia de esta especie. Su presencia es discreta pero constante, como un toque de dinamismo en medio del paisaje urbano.
4. Petirrojo (Erithacus rubecula)
El petirrojo es el poeta de la ciudad. Aunque su pequeño tamaño y su canto suave no son tan notados en medio del bullicio, este pájaro tiene una capacidad única para llenar de melodía los rincones urbanos. Con su característico pecho rojo, se esconde entre los arbustos y jardines, casi como un secreto compartido entre él y la naturaleza. Si alguna vez te has detenido a escuchar el canto claro y melódico que proviene de un rincón ajardinado, probablemente el petirrojo haya sido el responsable.
Con un comportamiento territorial, es bastante sencillo escuchar su canto al atardecer durante los meses de invierno. Escondido entre arbustos y árboles, no duda en bajar al suelo para capturar insectos y lombrices que permanezcan sobre las zonas verdes de nuestros barrios.
5. Mirlo común (Turdus merula)
El mirlo común, con su plumaje negro brillante (en los machos) y su canto melódico, es una de las aves más conocidas de las ciudades, pero también una de las que más fácilmente se pasa por alto. Sus hábitos de búsqueda de alimento en el suelo lo hacen frecuente en jardines y parques, pero su capacidad para camuflarse entre la vegetación y su comportamiento discreto lo hacen casi invisible en su entorno.
Es curioso cómo, a pesar de ser una de las aves urbanas más comunes, la mayoría de las personas no son conscientes de su presencia, que además es a menudo confundida con la presencia de estorninos.
Su característico y melódico trino, sin embargo, no es solo un detalle agradable, sino una forma en que el mirlo establece su territorio y mantiene un equilibrio con otros habitantes de la ciudad.
A medida que nos sumergimos en el ajetreo de nuestras vidas urbanas, a menudo olvidamos que estamos rodeados de una biodiversidad rica y sorprendente. Estas cinco aves, son solo algunos ejemplos de cómo la naturaleza encuentra su camino en las ciudades. Adaptadas a un entorno en constante cambio, estas especies no solo sobreviven, sino que también desempeñan roles cruciales en el equilibrio de los ecosistemas urbanos.
La próxima vez que salgas a la calle o te adentres en un parque, tómate un momento para mirar hacia arriba, escuchar y observar. La naturaleza está más cerca de lo que pensamos, solo hay que aprender a verla.
Pájaros en la cabeza
Comparto contigo como extra el último episodio del podcast del equipo de Ecoinsomnes, que precisamente habla de las aves, y en gran parte de aquellas con las que compartimos los entornos urbanos y más antropizados. ¡Dale al play y llena tu cabeza de pájaros! Además en este episodio podrás escuchar a nuestra compañera Annaïs Pascual y a Asunción Ruiz, directora ejecutiva de SEOBirdlife.