Las vacaciones de Navidad están a la vuelta de la esquina y seguro que os estáis preguntando cuál sería un buen destino para pasar unos días de relax en un entorno idílico con actividades que se adapten a los gustos de toda la familia. ¿Preparados para unas Navidades atípicas con propuestas super rompedoras y originales?
Nos trasladamos a Andorra, el país de los Pirineos, para explorar un entorno natural salvaje y genuino que presume de tener uno de los aires más puros del mundo. Este diminuto estado pirenaico ofrece un paisaje espectacular de montaña que combina una belleza salvaje con un compromiso excepcional con la sostenibilidad ambiental. Es el paraíso perfecto para los amantes de los deportes de invierno, las actividades al aire libre, la gastronomía de montaña, el bienestar, la cultura y el lujo.
Las vacaciones navideñas constituyen una ocasión apropiada para conocer este destino tradicional de los amantes del esquí. Andorra ha sabido reinventarse y aprovechar las posibilidades infinitas que ofrece la estación invernal para proponer planes alternativos: desde un viaje por el arte románico, vanguardistas centros de wellness, una reconocida gastronomía de montaña, originales actividades nocturnas a pie de pista, o descargas de adrenalina en divertidas atracciones como el Snake-gliss (serpiente de nieve) o el Màgic Gliss, ambos en Grandvalira.
Para los que disfrutan con los escenarios clásicos de estas fiestas, Andorra cuenta con su propia Aldea de Navidad (hasta el 5 de enero) que además del típico mercado navideño, situado en la plaza del Poble, ofrecerá actividades para todas las edades, espectáculos itinerantes, decoraciones sorprendentes y un sinfín de propuestas musicales. Mientras transitáis por las animadas calles de Andorra la Vella y contempláis su espectacular iluminación no descuidéis vuestras pertenencias: en cualquier momento os puede asaltar un menairon, uno de los traviesos duendecillos que habitan en el pico de Meners y que aprovechan la Navidad para sorprender tanto a turistas como a locales.
Paraíso del deporte blanco
Flanqueado por majestuosas montañas que rozan el cielo, este enclave pirenaico ha sido desde tiempos inmemoriales destino predilecto de esquiadores procedentes sobre todo de Cataluña y Francia. Con más de 300 km esquiables de todos los niveles distribuidos en tres estaciones, Pal Arinsal, Ordino Arcalís y Grandvalira, el esquí alpino y el de montaña, así como el snowboard son algunos de los deportes estrella.
Una de las grandes novedades de la pasada temporada es que Grandvalira Resorts, el dominio esquiable más extenso de los Pirineos, amplió su extensión con 5 nuevos kilómetros de pistas en Canillo, alcanzando los 308 km esquiables: un total de 217 pistas de esquí y 123 remontadores. Por su lado, el dominio de Ordino Arcalís ofrece la posibilidad de realizar escalada de hielo con un guía de montaña en el sector de La Coma. Siempre que las condiciones climatológicas lo permitan, se prevé que la temporada de esquí se extienda hasta abril. Para los que quieran disfrutar sin límites, existe un único forfait de temporada: el Andorra Pass, que incluye acceso ilimitado a las tres estaciones.
Adrenalina para toda la família
Cada vez son más los amantes de la aventura y la adrenalina que buscan vías alternativas para disfrutar de la nieve sin ponerse los esquíes. Grandvalira Resorts y Naturland, un parque de aventuras al aire libre en Sant Julià de Lòria, son la opción ideal para acceder a experiencias de película. A continuación os proponemos algunas de las más tentadoras:
Toboganes alpinos interminables
¿Te gustaría lanzarte por un tobogán alpino a una velocidad de vértigo? En el Mont Magic Family Park del sector Canillo, el Magic Gliss es una fascinante atracción con un tobogán de 555 metros de descenso y 180 metros de ascenso donde se pueden alcanzar velocidades de hasta 40 km por hora. Por su parte, en Naturland, el Tobotronc es uno de los toboganes alpinos más grandes de Europa. Ambas atracciones cuentan con el plus añadido de espectaculares paisajes durante todo el trayecto.
Construir un iglú
¿Se puede ser más original e intrépido? Un grupo de profesionales han ideado esta original actividad que consiste en colocar un globo en la base del futuro iglú y, seguidamente, echar nieve encima de forma que quede compactada y sólida. Además, podréis descubrir la fascinante historia que hay detrás de estas curiosas construcciones. Esta experiencia está disponible en espacios como Grau Roig o Pas de la Casa.
Excursión en raquetas de nieve hasta la Ovella Negra
Uno de los planazos de esta temporada es disfrutar de uno de los rincones más idílicos de Andorra: la Ovella Negra, un bucólico restaurante de montaña emplazado al final del valle de Incles a la orilla del río. Regocijarse con la belleza de un ambiente cálido y acogedor diseñado con elementos naturales y degustar su gastronomía tradicional de montaña es magia para los sentidos. Desplazarse hasta allí es ya en sí una aventura, ya sea con raquetas de nieve o mediante esquí de travesía. También se puede solicitar una excursión con un vehículo oruga que les acercará hasta el restaurante.
Mushing
El mushing o paseo en trineo de perros una de las actividades estrella para deleitarse con los paisajes irrepetibles de Andorra. Puedes practicarlo en los sectores de El Tarter y Grau Roig, ambos en la estación de GrandValira. Allí disponen de trineos de primera calidad y de perros adaptados y acostumbrados a esta actividad recomendada tanto para adultos como para niños.
Helisquí
Y si eres amante de las emociones fuertes, tu actividad es el heliski: los esquiadores son transportados en helicóptero hasta cumbres inaccesibles para que se lancen por pendientes de nieve virgen. Uno de los lugares en los que se puede contratar este tipo de experiencia es el Luxury Boutique Hotel & Spa Serras Andorra, en Soldeu El Tarter.
Otra de las apuestas de este impresionante resort cinco estrellas son sus dos pistas de nieve con sus correspondientes remolques. Es una pista ideal para principiantes y tiene un fuerte componente emocional, ya que este mini complejo acaba de cumplir 50 años de historia y gran parte de la población local ha aprendido a esquiar en las denominadas pistas Canaro.
Serras Andorra: pioneros del lujo sosegado
Esta experiencia invernal a través de los infinitos valles andorranos merece una estancia en un alojamiento de altura. En el corazón del Valle de Incles, Serras Andorra es un resort cinco estrellas en el que cada detalle está meticulosamente diseñado y la atención personalizada alcanza niveles de excelencia. Inaugurado hace aproximadamente dos años y medio ocupa ya un puesto de honor dentro del sector de lujo de Andorra. Adentrarse en el universo Serras es bucear en un oasis de paz, sosiego, elegancia donde nada se deja al azar. En palabras del general manager del hotel, Emili Yepes: «El secreto es que el huésped se sienta en su casa: a cualquier hora puede comer o beber lo que sea. Todo el equipo está volcado en el servicio de los huéspedes de una manera súper personalizada».
Diseñado en el interior de una antigua borda andorrana, el estudio de Eva Martínez ha elegido materiales nobles como madera, hierro, pieles, piedra y tejidos calurosos. La idea es que el viajero se sienta como en casa. Sus 57 habitaciones premium son amplias y luminosas y la mayoría disponen de impresionantes vistas a las montañas de Granvalira o el Valle de Incles.
Un asistente personal
En un ambicioso proyecto por posicionarse como referente del lujo divertido y silencioso, este hotel boutique es pionero en diversos aspectos y todas sus experiencias han sido diseñadas para que el huésped solo se preocupe de disfrutar. Además de sus pistas de nieve privadas únicas en Europa, cuenta con una figura muy especial: el sky buttler. Una suerte de mayordomía de esquí que no existe en ningún otro lugar. Entre sus funciones están ayudar a los huéspedes a ponerse las botas, calentarles los pies con toallitas calientes o subir el material de esquí al transfer que los trasladará directamente y de forma gratuita al remonte más cercano para la subida a las pistas de Grandvalira.
Todos los huéspedes cuentan además con taquillas privadas y personalizadas en la zona de ski room. El objetivo es que puedan acceder directamente desde el parking, cada habitación cuenta con una plaza propia, a la habitación sin cargar con el material. Otras de las exquisiteces del hotel es su original kids club, dirigido por profesionales que organizan diariamente actividades muy originales. El hotel cuenta además con el kids ski camp, ideado para que los más pequeños aprendan y jueguen en la nieve acompañados por el kids sky butler (monitor de esquí): el día empieza con un delicioso desayuno en el restaurante Bruna y sigue con yoga infantil, esquí y/o actividades en la nieve, manualidades e incluso una sesión de relax en el spa.
No podemos desvincular Serras Andorra de uno de sus servicios más personalizados y genuinos: el spa de última generación ubicado en la planta cero, junto al gimnasio y las cabinas de masaje. Un santuario de belleza y bienestar inspirado en la naturaleza. Se trata del primer espacio de bienestar orgánico y vegano de Europa y dispone de la única cabina de infrarrojos de Andorra.
El chef Marc Gascons, una estrella Michelin en Els Tinars, lidera la deliciosa propuesta gastronómica del hotel. Una magistral combinación del producto de proximidad y el recetario tradicional de cocina catalana de montaña. Un profundo respeto por la materia prima en un espacioso entorno donde prima el confort y la elegancia. Entre los platos estrella destacan los arroces y todas las recetas elaboradas con carne de vaca Bruna, la vaca autóctona de los Pirineos. El hotel dispone de varios espacios culinarios más donde se practica el culto al hedonismo culinario: la fromagerie de Bruna o el Cocktail 42 grados. A nosotros nos cautivó la Snow Terrace, que comparte carta con el restaurante Bruna y se encuentra a pie de pista. Un espacio acondicionado para el frío invernal con vistas de infarto a las hermosas colinas de Grandvalira.
Recientemente,Serras Andorra ha sido el ganador de los World Luxury Hotel Awards en tres categorías: Luxury Ski Resort Global Winner, Luxury Boutique Hotel en Andorra y Luxury Ski Hotel en Andorra.
No solo nieve
En la nueva versión de la Andorra contemporánea, la nieve ha dejado de ser la protagonista absoluta, convirtiéndose en parte de un mosaico de diversas propuestas que fascinan a todo tipo de viajeros. Para los amantes de las compras, Andorra La Vella es una capital con una sólida tradición comercial con más de 2.000 tiendas que habitan las Shopping Mile. La cultura forma parte también de la agenda del país de los Pirineos.
Entre muchas de las actividades previstas para el próximo año, destaca la exposición de la afamada fotógrafa estadounidense Vivian Maier. La sala de exposiciones del Govern, en Andorra La Vella, acogerá hasta el 1 de marzo de 2025 una significativa muestra de su extensa obra. Por otro lado, los aficionados al deporte blanco no pueden perderse la celebración de la Copa del Mundo de Esquí de Montaña de la ISMF (Federación Internacional de Esquí de Montaña), que tendrá lugar en el Parque Natural de Comapedrosa (sector Arinsal) los próximos 25 y 26 de enero de 2025.
Sea cual sea tu motivación, este microestado es un destino idóneo para visitarlo en cualquier época del año. 468 kilómetros cuadrados que abarcan un mundo de posibilidades donde las propuestas de ocio, el deporte, la gastronomía de altura y las actividades artísticas y culturales nunca se agotan.
Más información en: Serrasandorra y Visitandorra