Los vecinos de Oña (Burgos) celebran el próximo mes de agosto una de sus fiestas más destacadas: la recreación histórica del Cronicón de Oña, uno de los episodios más importantes de la historia de la “vieja Castilla”, que se escribió con sangre hace más de mil años.
Hace ya unos cuantos años que las fiestas basadas en recreaciones históricas han alcanzado en nuestro país un nivel de calidad muy elevado, con celebraciones capaces de atraer a miles de personas gracias a cuidadas puestas en escena, rigurosos vestuarios, y episodios históricos más o menos célebres: ahí están, por poner algunos ejemplos, el Arde Lucus (que se celebra cada año en Lugo, en la primera mitad del mes de junio), las Bodas de Isabel de Segura (en Teruel, cada mes de febrero), o la Semana Renacentista de Medina del Campo (mes de agosto).
Una de las notas características de todas estas celebraciones que tienen a la recreación histórica como protagonista es la decidida y apasionada implicación de gran parte de los vecinos de los lugares en los que se llevan a cabo. Así sucede, por ejemplo, en la villa burgalesa de Oña donde, desde hace ya 32 años, cada mes de agosto sus habitantes se vuelcan en la celebración del llamado Cronicón de Oña.
Los sucesos que sirven de inspiración a la fiesta de El Cronicón de Oña se remontan al siglo XI, una época en la que Almanzor era el azote de los territorios cristianos de la península ibérica. El entonces condado de Castilla vivía sumido en la rivalidad con sus vecinos, y en especial con los reinos de León y de Navarra, dando lugar a luchas, conspiraciones y traiciones.
En aquel escenario turbulento surgió la figura del conde Sancho García, quien gracias a su inteligencia y dotes diplomáticas consiguió llevar estabilidad y prosperidad a estas tierras castellanas, además de la fundación, en el año 1011, del monasterio de San Salvador de Oña. Este cenobio, cuyo poder religioso y económico alcanzó cotas inimaginables, fue epicentro de los acontecimientos que cambiaron una parte de la historia y su iglesia abacial el escenario donde, diez siglos después, se escenifica El Cronicón de Oña.
En la actualidad, todos los meses de agosto y durante cinco días –este año del 14 al 18, ambos incluidos–, los vecinos de Oña se convierten en actores protagonistas de esta vistosa recreación histórica, una de las más importantes de Castilla y León, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional. Una cita anual con la cultura, la historia, el arte y la diversión se ha convertido en un referente nacional de modelo de convivencia, de implicación vecinal, de esfuerzo y determinación de todo un pueblo por convertir un hecho histórico en toda una seña de identidad.
Con una experiencia de más de tres décadas de representaciones ininterrumpidas y gracias a la organización y buen hacer de la Asociación Cultural “El Cronicón de Oña”, con Perfecto Uriel Moreno en la dirección, se ha logrado una espectacular puesta en escena, donde se cuidan al máximo detalles como la luz, el sonido y el vestuario, este último realizado por mujeres de la villa siguiendo los patrones exactos de los trajes de la época, por lo que se trata de auténticas réplicas de los originales.
A lo anterior hay que sumar una historia repleta de personajes de renombre y acontecimientos trascendentes, representados con escrupulosa fidelidad, y por supuesto, el inigualable patrimonio artístico que sirve de escenario; todo ello ha contribuido a convertir esta representación histórica en un referente a nivel nacional.
Las recreaciones históricas en el interior de la iglesia abacial del monasterio de San Salvador tendrán lugar del 14 al 18 de agostoa las 22:00 horas, mientras que la escena previa en la escalinatadel templo se iniciará a las 21:30 horas. Las entradas se pueden adquirir en la web www.elcronicondeona.com y a través del teléfono de taquilla 947 300 477.