El turismo wellness o de bienestar se consolida como tendencia principal en Latinoamérica, donde Costa Rica y Perú destacan por sus experiencias transformadoras que combinan sabiduría ancestral y naturaleza. Descubre los destinos más exclusivos para tu bienestar integral.
En la búsqueda incesante del equilibrio holístico, los viajes de bienestar emergen como una tendencia transformadora para 2025. Más allá de simples vacaciones, estos viajes representan un viaje interior profundo, una inmersión consciente en experiencias que nutren el cuerpo, desafían la mente y reconectan el espíritu.
Costa Rica y Perú se erigen como destinos de peregrinación para el bienestar integral, ofreciendo paisajes extraordinarios que son verdaderos santuarios de renovación personal. Sus paisajes ancestrales, cargados de sabiduría milenaria, invitan a un proceso de sanación que va mucho más allá del descanso tradicional. Desde los rituales de purificación en la selva amazónica hasta las prácticas de meditación en los retiros de la costa pacífica, estos destinos latinoamericanos prometen una experiencia de transformación personal única.
Los viajeros conscientes encontrarán en estos destinos mucho más que un escape: hallarán un portal para la introspección, un espacio sagrado donde reconectar con la esencia más profunda del ser y renovar las energías vitales para enfrentar los desafíos contemporáneos.
1. Ceremonia ritual de cacao en Costa Rica
Los antiguos mayas descubrieron en el cacao puro un portal hacia la transformación espiritual, una tradición que hoy revive en las costas del Pacífico costarricense. Este ritual milenario, transmitido de generación en generación, utiliza cacao ceremonial de alta pureza para despertar la conciencia interior y facilitar una profunda conexión espiritual.
En Los Sueños Marriott Ocean & Golf Resort, rodeado por el exuberante bosque tropical y el murmullo del océano, se ha preservado la autenticidad de esta práctica sagrada. El ritual se realiza con cacao especialmente cultivado y cosechado con estos fines según las tradiciones mesoamericanas, potenciando sus propiedades naturales para abrir el corazón.
2. Hierbas ancestrales y medicinales: el patrimonio verde de América
Perú, un tesoro botánico milenario, despliega una rica tradición herbolaria que entrelaza conocimientos ancestrales con prácticas contemporáneas de bienestar. En el JW Garden del JW Marriott Lima, esta sabiduría natural cobra vida a través de experiencias sensoriales que integran hierbas medicinales locales en una propuesta holística de sanación y gastronomía.
La melisa —también conocida como toronjil— emerge como un bálsamo verde de propiedades calmantes, mientras que el chincho, un revitalizante andino, representa la fuerza energética de los Andes. Estas plantas, junto con otras especies nativas de Perú y América, trascienden los límites de la cocina tradicional para convertirse en protagonistas de una experiencia que equilibra cuerpo, mente y espíritu.
Desde infusiones aromáticas hasta aceites esenciales y rituales de sanación, cada preparación es un homenaje a la sabiduría botánica ancestral, invitando a los huéspedes a reconectar con los secretos curativos de la naturaleza.
3. La sinfonía interior de la sanación
El soundhealing va más allá de la simple terapia sonora para convertirse en un viaje de reconexión y transformación personal. Sus raíces profundas en ancestrales tradiciones de sanación se despliegan a través de instrumentos milenarios como los cuencos tibetanos y gongs, capaces de tejer un paisaje sonoro que penetra más allá de lo físico, alcanzando las capas más sutiles de nuestra existencia.
Cada vibración es una invitación a la introspección, una llamada silenciosa que conduce al cuerpo a un estado de relajación profunda. Las ondas sonoras actúan como un cincel sutil, limpiando y recalibrando nuestra mente, mientras los aromas complementarios ayudan a crear un entorno placentero.
En los salones del Costa Rica Marriott Hacienda Belén, esta experiencia encuentra su escenario perfecto: un entorno colonial rodeado de cafetales ancestrales y jardines, el soundhealing se transforma en un ritual íntimo que dialoga con la naturaleza, invitando a cada participante a desplegar su propia sinfonía interior.
4. Baño de bosque: conexión profunda con la naturaleza
El shinrin–yoku, o “baño de bosque”, es un arte ancestral japonés que invita a caminar pausadamente por entornos naturales, reconectando con la esencia primordial de la vida. Cada paso se convierte en un diálogo silencioso con la naturaleza, donde respirar se transforma en un ritual de sanación y cada árbol es un maestro milenario que susurra secretos de equilibrio y renovación.
Las fitoncidas –compuestos aromáticos liberados por los árboles– actúan como un bálsamo invisible para el sistema nervioso, reduciendo los niveles de cortisol y elevando las defensas naturales del cuerpo. Abrazar un árbol es una acción que, según antiguas tradiciones, permite absorber su energía vibratoria, equilibrando las emociones y revitalizando el cuerpo gracias a las fitoncidas.
En los exuberantes bosques nativos que rodean el Westin Reserva Conchal, el baño de bosque se convierte en una experiencia transformadora. Cada sendero es una invitación a desaparecer del mundo artificial y sumergirse en un santuario verde donde el estrés se desvanece, los sentidos se agudizan y el alma encuentra su respiración original.
5. El poder del mar: sanación a través del océano
El agua de mar, rica en minerales y energía, ha sido reconocida por sus propiedades terapéuticas tanto en la medicina científica como en las tradiciones holísticas. Las aguas del océano ayudan a neutralizar el estrés y las toxinas derivadas del entorno urbano, promoviendo la relajación profunda y elevando el estado de ánimo. Minerales como el magnesio y el calcio equilibran el pH del cuerpo, alivian tensiones musculares y revitalizan la piel, funcionando como un poderoso detoxificador natural.
Pero para las culturas mesoamericanas, el mar también simboliza un purificador espiritual. Bañarse en sus aguas o contemplar el movimiento de las olas durante un ejercicio de meditación se convierte en todo un ritual de renovación y limpieza energética. En W Costa Rica Reserva Conchal, estas cualidades se manifiestan plenamente en una de las playas más bellas de Costa Rica, ofreciendo una experiencia de calma y revitalización que conecta cuerpo y espíritu.
6. Ceremonia quechua de gratitud: el diálogo sagrado con la Tierra
El Haywarikuy es más que un ritual: es un lenguaje ancestral de reconexión, un puente milenario entre la humanidad y el espíritu de la Pachamama. Cada elemento de la ceremonia —hojas de coca, flores silvestres, semillas y granos— se transforma en una palabra de agradecimiento, un susurro de profunda reverencia hacia el origen de toda vida.
En JW Marriott El Convento Cusco, los viajeros tienen la oportunidad de participar en esta ceremonia guiados por un Paco quechua, o sacerdote andino. Este ritual ancestral trasciende la condición de experiencia turística para convertirse en una invitación íntima: reconectar con el pulso original de la naturaleza, comprender nuestra profunda interdependencia con el planeta y recordar la importancia de vivir en armonía con el mundo que nos rodea.
Estas experiencias trascienden la simple relajación, nutriendo el espíritu y conectando a los visitantes con las ricas tradiciones ancestrales y el poder sanador de la naturaleza.
En 2025, los hoteles de Marriott International en Costa Rica y Perú invitan a los viajeros a redescubrir el bienestar a través de experiencias únicas, enmarcadas en algunos de los paisajes más inspiradores del mundo.